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jueves, 28 de octubre de 2010

Ración de vídeos del mes IX

Se me acaba el mes y aún no había hecho la entrada de vídeos. Será que el atracón de vídeos de diábolo que me he pegado gracias a Wis y a sus trabajadísimas 3 entradas sobre el diábolo (ver) me ha saturado un poco.

Esta vez os traigo una muestra muy variada, con vídeos que se llevan más de un siglo de diferencia. Vayamos del pasado al presente para acabar en lo más contemporáneo. Y de postre, como siempre, una simpática curiosidad.

1) Julians, Troupe Acrobática (1902). viene bien ver estos vídeos para darse cuenta de que en circo tampoco se está inventando gran cosa, simplemente se le da otro enfoque, pero la base estaba ya perfeccionada hace mucho tiempo. Lección de humildad, y encima en traje, con clase. Más información en: Palace of Variety.



2) Larry Griswold. Tremendo vídeo de este clown-gimnasta que, como curiosidad, también fue co-creador del trampolín. Aquí sale en el show de Frank Sinatra realizando su rutina, como decían por ahí: dificil y peligroso, pero muy divertida (os dejo enlace a su curiosa biografía, en inglés: The Diving Fool).



3) Evgeni Biljauer. Uno de los más grandes malabaristas rusos de la historia, y eso es decir mucho. Sin palabras, qué seguridad con toda la rutina.



4) Air Jazz. Uno de los tríos de malabares más influyentes de los últimos 30 años. Creados en 1982, mantuvieron a sus tres componentes (Peter Davidson, Kezia Tenenbaum y Jon Held) durante los 10 años que duró su carrera. Visitaron muchas televisiones y países (incluído España) con su divertido y solidísimo número de mazas, salido de los números de calle tan frecuentes en los EEUU de aquella época. Más que por la dificultad técnica, triunfaron por el buen ambiente que transmitían y la forma renovada de presentar estas rutinas. Un clásico imprescindible.



5) Yuri. Llegamos a la más rabiosa actualidad. Estos dos chicos han creado una bonita rutina muy técnica y con ese estilo tan particular de los japoneses con las bolas. Merece la pena seguir a esta pareja.



6) Felicidad aeroportuaria. Ya está aquí la sorpesa prometida. No he podido evitar sonreir al ver cómo pasa el rato esta monja en un aeropuerto. Yo también lo hago y lo recomiendo encarecidamente, ideal para vuelos retrasados o enlaces interminables.



Bien, esto ha sido todo por este mes, espero que el viaje temporal no haya mareado mucho, que tenía muchos saltos. Prometo ser algo más lineal en próximas ediciones.

¡Salud y mucho circo!

1 comentario:

  1. qué bueno!
    estupendo para comprobar lo poco que hemos evolucionado. solo me hubiese sorprendido más si lo de la monja hubiese sido en 1910 ;)

    LAU

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